miércoles, 18 de julio de 2012

'Cosmos: un viaje personal', 30 años de su primera emisión en TVE.


Hace 30 años, un jueves 15 de julio de 1982 nada más finalizar el Teledario 2ª edición sobre las 21.35 horas, pudimos presenciar por primera vez en España y a través de TVE1 una de las series de divulgación científica más impactantes y de mayor éxito se recuerdan en televisión Cosmos: un viaje personal. Conducida y escrita por el fallecido astrofísico Carl Sagan para la televisión pública estadounidense a finales de los 70, en la que a través de sus trece capítulos de una hora de duración, el propio Sagan nos fue contando la historia de la humanidad en torno al Universo como no se había hecho hasta el momento, desde el entusiasmo de un verdadero apasionado de la ciencia y por medio de un lenguaje claro al que acompañaban sorprendentes imágenes con efectos especiales y una extraordinaria selección musical en cada una de las secuencias ilustraban sus historias, consiguiendo así despertar el interés y curiosidad de millones de telespectadores y también, como no, descubrir cientos de vocaciones científicas.


Carl Sagan fue un científico que adquirió prestigio y fama a nivel mundial especialmente por su gran capacidad para atraer al gran público en su interés por la ciencia. Vio en la clase política y la iglesia los principales inconvenientes para un correcto desarrollo del método científico y pensamiento crítico. Y como escéptico militante le llevó a mostrarse especialmente combativo con las creencias infundadas desde la astrología hasta la superstería. Además siempre se mostró preocupado por el escaso interés mostraban los medios de comunicación por la divulgación científica y la forma en que esta era transmitida. Hasta el punto que en su colaboración con la NASA para la exploración de Marte, hecho que fue desatendido por completo por los medios de comunicación. Esto provocó en él una enorme frustración, y como respuesta a la misma surge la serie Cosmos.

Lo que Carl Sagan no podría imaginar era que Cosmos llegase a tener tanta repercusión. De hecho pasó a ser emitida en más de sesenta países y vista por cientos de millones de telespectadores. Considerada una verdadera obra de culto y de obligada consulta por su enorme valor didáctico, pues consiguió casi lo imposible y es que el saber científico resultase sencillo y claro a un telespectador no erudito en la materia pero tratado como requiere, con todo el rigor y profundidad. De esta forma pasaron a resultar familiares al común términos como big bang, supernovas, galaxias, quarks, agujeros negros, quasars, entre otros. Supimos de las partículas más elementales componen el Universo, de la teoría de la evolución, de la probabilidad de vida extraterrestre. Pero su lección no terminaba en los descubrimientos y conocimientos de la humanidad en torno al Universo. Trató de involucrar al telespectador con una serie de interrogantes sobre su propia existencia y devenir haciéndole partícipe en su descubrimiento. Y nos alertó a su vez de ciertos peligros podría desencadenar la acción del Hombre sobre la Tierra, desde la guerra nuclear pasando por el cambio climático. Su repercusión no quedó reducida a la serie televisiva, Cosmos contó con su versión en papel lo que le llevó a ser uno de los libros científicos más vendidos del siglo XX.


Cosmos ha conseguido ser mucho más que un referente dentro de los programas de divulgación científica en televisión. Constituye toda una reliquia del saber científico, cuyos postulados siguen permanentemente indelebles en el pensamiento humano, en la orilla del océano cósmico, en referencia al título del primer capítulo de la serie, sólo es cuestión de sumergirnos en él y así poder descubrirnos, como si de un viaje personal se tratase.


lunes, 9 de julio de 2012

Stephanie Zimbalist, Laura Holt en 'Remington Steele'.


Stephanie Zimbalist será recordada por encarnar a la detective Laura Holt en una de las series míticas de mediados de los 80 Remington Steele, a la que acompañaba el que era su jefe imaginario y socio, personaje que interpretó Pierce Brosnan, por entonces todo un desconocido, conformando así una de las parejas televisivas del momento y que consiguieron atrapar a millones de telespectadores en los diferentes países donde fue emitida, entre ellos España.


Stephanie Zimbalist nace en Nueva York en  el seno de una familia de reconocidos artistas, de padre actor, abuelo concertista de violín y abuela destacada soprano. Recibe una educación más propia de un niño, adquiriendo ciertas cualidades de líder, lo cual la lleva en su pasión por el teatro a formar su propia compañía al tiempo que cursa estudios de interpretación, danza y canto. Sin embargo, sus inicios como actriz, a finales de los 70, tienen lugar haciendo películas para televisión, género en el que acabará especializándose, de sus comienzos cabe destacar Niño de ayer, El encuentro, Para siempre, El mejor lugar para estar, Momentos de oro, La niñera, Niño de mañana, etc.

Stephanie Zimbalist en el personaje de Elly Zendt de la miniserie Centenario.

También la pudimos ver en algunas series televisivas de finales de los 70 como Vacaciones en el mar, la miniserie Centenario, e incluso llegó a participar en un par de películas como La magia de Lasie 1978 y El despertar 1980.


Pero su gran oportunidad vendría en 1982 cuando se le ofrece protagonizar a una investigadora privada llamada Laura Holt en una nueva serie para la NBC que llevaría por título Remington Steele, nombre que Laura Holt decide poner a la agencia de detectives regenta sustituyendo al suyo al ver que el número de casos se reducían por el hecho de ser mujer, idea de esta forma un jefe imaginario llamado Remington Steele y que pasaría a ser adoptado por un atractivo y enigmático personaje interpretado por Pierce Brosnan.  


La serie se convirtió rápidamente en un éxito, en parte gracias a sus dos protagonistas principales por la constante tensión sexual sin resolver nos sometían en cada uno de los episodios que junto a las tramas con misterios fascinantes y diálogos ingeniosos hicieron de Remington Steele una de las mejores series detectivescas de mediados de los 80.

Doris Roberts, Pierce Brosnan y Stephanie Zimbalist.

Cabe destacar el marcado carácter de comedia llegó a tener la serie en especial a partir de la segunda temporada con la incorporación de un nuevo personaje, la secretaria de Remigton Steele Mildred Krebs, que interpretó Doris Roberts, capaz de retorcer las investigaciones como comprometer a sus jefes en cada uno de los casos pasaban por la agencia.


En 1986, y después de cuatro temporadas, la NBC decide cancelar por la paulatina bajada de audiencia, aunque también se apunta que los motivos de su retirada fueron, entre otros, las continuas exigencias económicas al alza pedían tanto Stephanie como Pierce, el deseo de Pierce en abandonar la serie por otros proyectos más ambiciosos e incluso algunos ponen el acento en el deterioro en la relación venían manteniendo ambos protagonistas.


Una vez cancelada a Pierce Brosnan le ofrecen suceder a Roger Moore como James Bond. Esto fue aprovechado por la NBC para cambiar de planes retomando de nuevo la grabación de la serie a razón  del tirón mediático de Pierce Brosnan, de la cual se hicieron hasta seis capítulos pero el desinterés manifiesto de sus protagonistas Stephanie y Pierce y la falta de encanto en el personaje de Stephanie llevó a la NBC a su cancelación definitiva en 1987.


Sean cuales fueren los motivos, lo cierto es que Pierce Brosnan a partir de Remington Steele su caché no hizo más que subir dando el salto al cine en el que permaneció durante muchos años con gran éxito, en especial al interpretar el personaje de James Bond. No se puede decir la mismo de Stephanie Zimbalist, pues su carrera quedó relegada de nuevo a las películas para televisión aunque recibió cierto reconocimiento y éxito por alguna de sus interpretaciones. Sin embargo, su carácter, desinterés y compromiso con la causa republicana ayudó a que las puertas de la meca del cine y por tanto de Hollywood se le cerraran por completo.

Stephanie Zimbalist en el personaje de Caroline.

Finalizados los 80, cabe destacar dos películas para televisión, El hombre de traje marrón 1989 basada en una novela de Agatha Christie, en la que vuelve a encarnar a una detective, y Caroline 1990 por la que recibió el aclamo de la crítica, estando ese mismo año nominada a los Globos de oro y a los premios Emmy. Ya en los 90, aparte de haber realizado innumerables películas para televisión, pudo recuperar su gran pasión por el teatro y que ha mantenido hasta la actualidad, así como ha tenido ocasión de participar en algunas series de televisión como Tocado por un Angel, Diagnóstico asesinato, Nash Bridges o Crossing Jordan, entre otras.


Por último, hacer hincapié en la importancia tuvo Stephanie Zimbalist con su interpretación de Laura Holt, pues no sólo nos ofreció todo un personaje difícil de olvidar también marcó un antes y un después en lo que se refiere a la presencia de un nuevo prototipo de mujer en las series de televisión caracterizado no sólo por su belleza, sino también por su independencia, inteligencia y sentido del humor. Cualidades generalmente reservadas al hombre. Laura Holt rompió ciertos estereotipos ciertamente machistas a favor de un mayor protagonismo de la mujer e intercambio de roles con el consiguiente conflicto con el hombre sin por ello tener que renunciar a la feminidad, y que tuvo su continuidad años más tarde en otros personajes como el de Maggie de la serie Luz de luna.